Aquí os propongo una versión tradicional más refinada y tentadora, originaria de las Marcas (una región situada en el centro de la Península italiana), de un plato que las amas de casa suelen llevar a la mesa y que implica el uso de un ingrediente muy especial: la trufa negra.
Ingredientes:
1 conejo entero deshuesado
Aceite de oliva extra virgen
300 gr. de carne picada de ternera
300 gr. de carne picada de cerdo
un vaso de leche
dos huevos
50 gr. de queso Parmesano rallado fino
100 gr. di pan rallado
2 dientes de ajo
Sal y pimienta al gusto
1 vaso de vino blanco
50 gr. de trufa negra fresca picada
Ejecución:
Disponed en una fuente las carnes picadas junto con los ajos, el queso, los huevos, el pan, la trufa negra, sal y pimienta y el vaso de leche. Mezclar todo y agregar un poco más de leche si el relleno lo requiere.
Deshuesar al conejo (o pedirle al carnicero que lo haga por ti) y llenarlo con el relleno, luego atarlo con una cuerda de cocina. Precalentar el horno a 200º, colocar el conejo en una sartén con un poco de aceite de oliva y dos dientes de ajo.
Dorar el conejo y añadir el vino blanco. Cocinar a 180º durante aproximadamente 60-90 minutos, humedeciendo de vez en cuando con la base de cocción.
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